Kiev, 7 de agosto de 2024 – El gobierno ucraniano ha acusado a Bielorrusia, un país aliado de Moscú, de «acciones inamistosas» tras detectar una concentración de tropas en su frontera común. En un comunicado emitido por la Cancillería ucraniana, se instó a Minsk a evitar cualquier error que pudiera resultar trágico para su nación, presionada por Rusia.

El comunicado se produjo en un contexto de alta tensión, después de que Ucrania llevara a cabo una incursión en la región rusa de Kursk y mientras las tropas rusas continuaban su avance en el este de Ucrania. Kiev asegura que los servicios de inteligencia ucranianos han observado un despliegue significativo de personal bielorruso en la región de Gomel, cerca de la frontera noreste de Ucrania, bajo el pretexto de realizar ejercicios militares.

«Advertimos a los funcionarios bielorrusos que no deberían cometer errores trágicos bajo la presión de Moscú e instamos a sus fuerzas armadas a cesar estas acciones inamistosas y retirar sus tropas a una distancia mayor del alcance de los sistemas de disparo bielorrusos», subrayó el comunicado.

Además, Ucrania ha acusado a Bielorrusia de acumular equipos y tropas, incluyendo la presencia de combatientes del grupo paramilitar ruso Wagner, quienes habrían buscado refugio en Bielorrusia tras la fallida rebelión de su líder el año pasado. El gobierno ucraniano alertó que las maniobras militares cerca de la frontera representan una amenaza para la seguridad mundial, dada la proximidad de la central nuclear de Chernóbil.

«Recalcamos que Ucrania nunca ha tomado ni tomará acciones inamistosas contra el pueblo bielorruso», concluyó la Cancillería ucraniana.