El presidente Javier Milei ha reafirmado su intención de adquirir submarinos, una decisión que subraya su compromiso de restaurar la capacidad submarina de la Armada Argentina, gravemente afectada tras el trágico accidente del submarino ARA San Juan en 2017. Durante un discurso en el que detalló los logros y proyectos prioritarios de su gestión, Milei destacó: «En Defensa hemos realizado la compra de armamento más grande de la historia, no solo con la adquisición de los F-16. Estamos construyendo una base en Tierra del Fuego, comprando tanques, llevando a cabo operativos con EE.UU. para el patrullaje costero, adquiriendo barcos y realizaremos la compra de submarinos. En 50 años no se hizo nada similar.»

La mención específica de los submarinos no es casual. Desde la pérdida del ARA San Juan, Argentina ha estado en una situación de vulnerabilidad en cuanto a su capacidad de defensa submarina. Las palabras de Milei reflejan la necesidad urgente de recuperar esta capacidad estratégica, no solo para fortalecer la defensa nacional, sino también como un homenaje y compromiso con la memoria de los 44 tripulantes del ARA San Juan.

El jefe del Estado Mayor General de la Armada, Contraalmirante Carlos María Allievi, también confirmó que la fuerza está buscando una unidad submarina que pueda ser incorporada operativamente a corto plazo, mientras se planea la adquisición de nuevos submarinos para el mediano y largo plazo. La Armada Argentina ha evaluado propuestas de Naval Group y Thyssen, analizando submarinos Scorpène y 209 de nueva generación, respectivamente.

Este esfuerzo por renovar la flota submarina es visto como un paso fundamental para garantizar la soberanía y seguridad en las aguas del Atlántico Sur, especialmente tras un periodo de inactividad y falta de inversiones en esta área crítica de la defensa nacional. Con esta iniciativa, el gobierno de Milei no solo busca modernizar las Fuerzas Armadas, sino también restaurar la confianza en la capacidad operativa de la Armada, recordando la importancia de una defensa marítima sólida tras la tragedia del ARA San Juan.