En la Plata en la noche del martes, cuando dos delincuentes menores de edad robaron un Fiat Palio rojo sin percatarse de que en su interior estaba una niña de 7 años. El violento episodio ocurrió en la puerta del mayorista El Nene, ubicado en la intersección de las calles 72 y 24, en el barrio Altos de San Lorenzo.

Según testigos, los delincuentes estuvieron merodeando la zona minutos antes del robo. Se los vio caminando y sentándose cerca de una verdulería en las calles 25 y 72, lo que generó sospechas entre los comerciantes. Poco después, cuando el auto de la víctima se detuvo en la zona, los ladrones aprovecharon la oportunidad y lo robaron.

La mujer que conducía  el rodado logró escapar, pero su hija, que tenía puesto el cinturón de seguridad, quedó dentro del vehículo.  Desesperada, la madre corrió detrás del auto gritando que su hija estaba adentro.

Kim Gómez, la menor, fue arrastrada por el vehículo durante aproximadamente 15 cuadras tras el robo. A pesar de los intentos por detener a los ladrones, la menor sufrió heridas fatales y perdió la vida en el trayecto.

Los delincuentes impactaron contra un poste de luz y cayeron en una zanja, lo que los obligó a abandonar el vehículo y escapar a pie por un descampado. Cuando la policía llegó al lugar, halló el cuerpo de la niña debajo del auto.

En un operativo de búsqueda, que incluyó el uso de un helicóptero, los efectivos lograron rastrear a los sospechosos. Finalmente, el padre de uno de los delincuentes, un joven de 14 años, decidió entregarlo a la policía  y reveló que su hijo había cometido el crimen junto a un amigo.

El caso está siendo investigado por la Fiscalía de Responsabilidad Juvenil N°3 de La Plata, a cargo de Carmen Viviana Ibarra. 

Ayer Decenas de personas se movilizan con carteles para exigir mayor seguridad en la localidad de Altos de Lorenzo, zona donde ocurrió el crimen de la menor el martes por la noche.

Tras partir desde Altos de San Lorenzo en dirección a la Plaza Moreno llegaron al frente de la sede municipal que no contaba con custodia policial. Algunos manifestantes arrojaron piedras contras el frente del histórico edificio y rompieron vidrios. El intendente local, Julio Alak, no se expresó sobre el incidente.